miércoles, 29 de octubre de 2008

La inseguridad en el conurbano bonaerense vuelve a instalarse como un tema mediático, a partir del revuelo causado por el asesinato del ingeniero Barrenechea. A pesar de ser un tema supuestamente de agenda y una preocupación cotidiana de hace varios años no hay soluciones concretas.
A lo largo de la última década se llevaron a la práctica desde el estado varios planes de lucha contra la inseguridad, ninguno de ellos logro resultados por lo menos en forma notable. El principal inconveniente es desde mi punto de vista el que todos estos se encontraban orientados básicamente a la lucha de los síntomas y no a las verdaderas raíces del problema.
Se ataca sistemáticamente a los criminales, se busca la forma de profundizar los mecanismos represivos con los que cuenta el estado, para contar de esta forma con el mayoritario apoyo de aquellos egoístas o desinformados que solo se encuentran preocupados por su situación personal y no creen en, o no se encuentran dispuestos a realizar el desmedido esfuerzo que se debería hacer para eliminar o disminuir en lo máximo posible las causas reales de la inseguridad.
Se propone reducir la imputabilidad de los menores, aplicar el máximo rigor de la ley, el cual creo debe ser aplicado con medida pero principalmente se debe atacar la pobreza, (con lo primero no alcanza se requieren soluciones a largo plazo y no sustanciales) con esto no refiero a que pobreza se sinónimo de delincuencia pero si creo que la desigualdad social, las fuertes diferencias son disparadoras, motivadoras. La falta de oportunidades, opciones, las necesidades el posible rencor etc.
La principal arma contra la inseguridad debe ser la inclusión social, la oportunidad, el afecto, el sentirse parte.
En un principio el gobernador Scioli planteo bajar la imputabilidad de los menores como una mera reacción oportunista y casual a lo ocurrido, no quería parecer inmóvil. Días después y luego de fuertes críticas adecuo su discurso a que también se debe cambiar la realidad social.
Estaría bueno empezar por cambiar a los punteros por verdaderos trabajadores sociales.
Linda forma de transformar el pais:

http://www.diarioperfil.com.ar/edimp/0307/articulo.php?art=10650&ed=0307

1 comentario:

Juan Bautista dijo...

Coincido con tu postura. Me parece que el tema de la inseguridad, como todos los grandes problemas, no tiene una solución concreta. No hay medidas estanderizadas, no hay un único plan válido para contrarrestar los efectos de la inseguridad. Creo que es un tema que debe abarcarse desde muchos puntos diferentes: desde lo social, lo político, lo económico,etc.
Aunque válidas, las medidas como la propuesta de Scioli, no están hechas para encarar el tema desde las bases. Son medidas sumamente superficiales, a corto plazo. El conjunto de ellas no tienen porque resultar en una solución eficiente.